OoAle quiere una mascota: un perro, un gato, una gallina, un elefante… Pero sus padres NO quieren animales en casa. Un día la niña se encuentra un huevo gigante en el parque y se lo lleva a casa, lo cuida y lo mima. Cuando el huevo se rompe…
Carlota no habla porque no le hace falta. Hasta que un día se queda encerrada en la despensa. Sola.
En Villa Pesadilla, los vecinos no pueden dormir ni vivir tranquilos porque el fantasma de las bragas rotas les asusta a todas horas. Para acabar con este asunto irán a su castillo Mario Bolirrojo, Vera la Bombera pero todos huyen despavoridos. ¿Cómo conseguirán solucionar el problema del fantasma de las bragas rotas?
«Desalmau era el Capitán más temible de todos los mares del Norte, del Sur, del Este y del Oeste. Daba tanto miedo que no se afeitaba para no tener que mirarse en el espejo.» Un cuento de miedo para que no vuelvas a tener miedo.
La bruja Pocha era una bruja con estudios (con estudios de brujería, claro está). Estaba titulada por la universidad de susto y disgusto en brujería, pócimas y caldos de pescado. Era la mejor en crear pesadillas de ajo y pepino, apagones inoportunos y mocos veraniegos. Era una bruja tan preparada, que podía pronunciar tres conjuntos a la vez mientras arrugaba una camisa, quemaba la comida, ensuciaba la ropa y regañaba a sus diecisiete ratones lectores por no estar correteando por la casa.
¿Quién podía imaginar que esta historia comenzó bajo el mar?
Llega la hora del baño y estos cuatro Pieles Rojas se resisten a pasar por la ducha. La Gran Jefa Soparrica deberá tomar cartas en el asunto...
El capitán Cacurcias era el más valiente de todos los piratas, pero hace poco tiempo empezó a tener miedo de todo. Hasta de su sombra. En el barco del fantasma de los ojos azules, Cacurcias tendrá que enfrentarse al mismísimo fantasma, a un vampiro… ¡y hasta al hombre lobo! Una divertida historia de miedo para quitarte el miedo. Los piratas vuelven en un magnífico álbum ilustrado. Del autor de El pirata de la pata de pata.
Este cuento plantea, utilizando el sentido del humor como hilo conductor, una serie de reflexiones para que las personas adultas y las niñas y los niños jueguen juntos.
Esta niña es muy buena. Hace todo bien en el colegio, en casa... Pero a veces se pone su disfraz y se convierte en ¡Traviesagirl! Y ya no es tan buena, hace muchísimas travesuras.
El avestruz Mariluz y sus dos amigas paseaban por la sabana. Los tres avestruces comían flores: “Ñam, ñam, ñam.” Se encontraron con tres leones que querían comérselas. ¿Qué harán los avestruces para salvarse?
Una niña paseaba por la calle vacía de la lejana Transilvania cuando ¡apareció una enorme sombra! ¡Una sombra que asombra! —¡ZOY UN VAMPIRO! ¡UN VAMPIRO PELIGROZO! La niña tembló, pero de risa. Este vampirito no consigue dar un susto a nadie. A este paso no podrá superar el examen de la escuela de vampiros… Una divertidísima historia para superar nuestros miedos.