A una niña le gusta un niño, pero el niño no se fija en ella, no la mira. ¿Qué hacer? Sus amigos le aconsejan de todo: que se quite las coletas, las gafas, la sonrisa, las pecas, las alas, que no sea tan parlanchina. El niño por fin se ha fijado en ella, pero, con tanto quitar, hasta se han ido los pájaros de su cabeza. Y la niña se da cuenta de que ya no es ella y decide recuperar sus coletas, sus gafas, su sonrisa, sus pecas, sus alas, sus palabras…
Esta es una edición renovada del exitoso libro publicado originalmente en 1989 en Argentina. Si nos encontramos ante algo que pudiera ser un monstruo, es mejor asegurarse de que realmente lo sea. Si sus patas son enormes y peludas. Si tiene tantas patas que forman un bosque. Si su cola se extiende por metros y metros.