Pobre y viejo dragón. Nadie quiere que forme parte de su cuento, ni Ricitos de oro ni Hansel y Gretel ni nadie. ¡Pero Dragón no se da por vencido! Seguirá en su búsqueda de alguien que sí le quiera en su historia. QUIENQUIERA QUE SEA. Sin duda, su inagotable entusiasmo impedirá que se meta en cualquier problema. Es probable… Un cuento maravilloso acerca de dragones, héroes y helado.
Éste tendría que ser un cuento sobre un Lobo Feroz que sopla y sopla hasta derribar las casas de los cerditos, que engaña a Caperucita Roja para comerse a su abuelita Pero no podrá ser, porque el Lobo Feroz llega tarde. ¡Otra vez! No hay un solo día que llegue puntual al cuento que le toca y el resto de los personajes se enfadan con él. ¿Pero alguien se ha parado a pensar en lo difícil que es ser el Lobo Feroz de todos los cuentos?
Maisy está enfadada porque su hermano Ed no le presta sus muñecos de dinosaurios. Ed piensa que los tricerátops y los tiranosaurios no son cosa de chicas. Pero Maisy sabe que está equivocado. Sólo lo dice porque él no ha visto nunca a la enorme, fiera y poderosa ¡Tiranosauria!